El banco ha realizado provisiones por 242,5 millones en el ejercicio, con lo que el resultado antes de impuestos de la actividad bancaria cae a 230,5 millones de euros, un 62% menos que en 2019. Este descenso es debido tanto a las provisiones como a la ausencia de los extraordinarios que la entidad se anotó en 2019 por la compra de EVO. El grupo ha conseguido sin embargo atenuar la caída que registraba hasta septiembre, que era del 50,5%. El beneficio neto de Línea Directa se situó en 135 millones de euros, un 26% más que el año anterior, con un resultado antes de impuestos de 179,6 millones. La aseguradora presenta sus cuentas de forma desagregada de la actividad bancaria "a la a espera de su próximo despegue como entidad independiente", señala Bankinter.
Todos los márgenes suben. El margen de intereses aumenta un 6,8% hasta 1.247 millones. El margen bruto aumenta un 3,6% hasta 1.709 millones y el de explotación sube un 4,5% hasta 880,2 millones. En cuanto al capital, la entidad finaliza el año con una ratio de capital CET1 fully loaded del 12,3%, frente al mínimo del 7,7% exigido por el BCE.
La ratio de mora se reduce y se sitúa en el 2,37%, con una caída de 14 puntos básicos respecto al 2,51% de hace un año.
Las acciones de la entidad financiera suben un 1% tras publicarse estos resultados.