“En Cataluña la crisis ha afectado a la economía. Hemos conseguido mantener el tráfico hacia o desde nuestros aeropuertos de Barcelona pero sólo gracias a una reducción del 30 por ciento en los precios”, explicó. “España es muy importante para nosotros”, agregó.
Las tensiones políticas en Cataluña por la amenaza independentista han llevado a centenares de empresas a trasladar su sede y están drenando crecimiento de una de las regiones más ricas de España.
Aunque desde el Gobierno central se espera que la normalidad vuelva a corto plazo y organismos internacionales como el FMI han mejorado su previsión para 2019, este año todavía se estima que la inestabilidad marque el mapa político catalán.
Aunque desde el Gobierno central se espera que la normalidad vuelva a corto plazo y organismos internacionales como el FMI han mejorado su previsión para 2019, este año todavía se estima que la inestabilidad marque el mapa político catalán.
Tras las elecciones de diciembre en el que los partidos independentistas lograron mayoría en escaños, todavía no se han puesto de acuerdo para nombrar un candidato alternativo al líder de JXC, Puigdemont, ante las dificultades que está encontrando este para ser investido sin regresar a España. “Para llenar los aviones tuvimos que rebajar los precios de forma muy significativa, principalmente en momentos de alta atención mediática (...) Dejaremos de bajar los precios en Cataluña cuando volvamos a atisbar crecimiento y de momento no hay visibilidad”, dijo O‘Leary.
“Hay nerviosismo en la gente que reserva billetes hacia Barcelona. Hay nerviosismo allí, en Reino Unido, en Irlanda, en Alemania (...) Hay fortaleza en el tráfico en Madrid pero Barcelona está débil”, agregó.
En todo caso, el grupo prevé abrir 29 nuevas rutas en España, la mayoría de ellas (13) desde Sevilla, tres desde Palma y Alicante, seis desde Valencia y una desde Barcelona, Tenerife, Gran Canaria y Santander, pero ninguna desde la capital española.
Las aerolíneas han incrementado su capacidad en el país en los últimos años trasladando tráfico desde Oriente Próximo y el norte de África después de una serie de atentados contra turistas, lo que ha provocado una presión a la baja sobre las tarifas medias.
“Hay nerviosismo en la gente que reserva billetes hacia Barcelona. Hay nerviosismo allí, en Reino Unido, en Irlanda, en Alemania (...) Hay fortaleza en el tráfico en Madrid pero Barcelona está débil”, agregó.
En todo caso, el grupo prevé abrir 29 nuevas rutas en España, la mayoría de ellas (13) desde Sevilla, tres desde Palma y Alicante, seis desde Valencia y una desde Barcelona, Tenerife, Gran Canaria y Santander, pero ninguna desde la capital española.
Las aerolíneas han incrementado su capacidad en el país en los últimos años trasladando tráfico desde Oriente Próximo y el norte de África después de una serie de atentados contra turistas, lo que ha provocado una presión a la baja sobre las tarifas medias.